La historia de D’Ara Grup es la historia de una familia que, durante tres generaciones, ha sabido construir su futuro a base de trabajo, ilusión y visión de negocio, asumiendo que para que los sueños se hagan realidad hace falta creer en ellos.
Joan Clavel Vila fue el fundador de la saga empresarial. Chófer para familias acomodadas de Mataró (Barcelona), Joan Clavel intuyó que para poder prosperar era necesario emprender, cuando el significado de esta palabra distaba mucho de lo que ahora implica. Por esta razón, aprovechó sus conocimientos autodidactas en cuanto a mecánica y abrió un taller de venta y reparación de motocicletas en una calle del centro de la ciudad, Mataró.
Podría haber sido un taller más, una tienda más, si no hubieran empezado a aparecer aspectos que de nen a una familia con espíritu empresarial. El taller de Joan Clavel se convirtió poco a poco en concesionario de diferentes marcas de motocicletas y, de nuevo, un punto de in exión se produce cuando se adquiere la representación de la marca Vespa, momento que coincide en el tiempo con la incorporación de la segunda generación de la familia Clavel al negocio familiar. El hijo de Joan Clavel, Guzmán, conoce desde pequeño los avatares que supone gestionar un negocio
sin horarios y sin apenas días festivos.
Es un tiempo de cambios y los automóviles, hasta entonces objeto de lujo de unos pocos y de deseo de muchos, empiezan a estar al alcance del bolsillo de una gran parte de la sociedad. La familia Clavel observa esa tendencia y se anticipa al gran boom de la venta de coches con el establecimiento del primer concesionario Renault en el Maresme. Era 1963. Desde ese año hasta medidados de los 80, el concesionario
Renault experimentó un crecimiento constante y se convirtió en todo un referente para la marca.
El mundo del motor y la familia Clavel seguían avanzando conjuntamente, y el siguiente paso, casi natural, fue la incursión en el ámbito de las gasolineras, ya en los años 70, con una primera estación de servicio en la zona norte de Mataró, que implicó también una importante actuación inmobiliaria, y una segunda gasolinera en la zona noreste de la capital del Maresme. Tras la liberalización del mercado del petroleo, se construyeron tres gasolineras más en la propia ciudad. El crecimiento era continuo y anticipaba dos nuevos hitos en la historia empresarial de la familia Clavel,
casi coincidentes en el tiempo.
Guzmán Clavel demostró una gran visión de futuro y de negocio cuando logró convencer a un grupo de empresarios de estaciones de servicio, como él, que podían conseguir controlar autónomamente algunos procesos previos que hasta entonces requerían de intermediarios. Era una empresa compleja, no exenta de riesgos, pero el entusiasmo de Clavel acabó siendo el catalizador de la petrolera independiente Meroil, fundada en 1993. Para esas fechas, la tercera generación de los Clavel se había incorporado al negocio familiar gracias a la figura de Jordi, hijo de Guzmán y nieto de Joan.
Casi en paralelo, en 1995, se adquiere una gran parcela en una zona deshabitada de Mataró y se construye un edificio singular, coronado por una torre con personalidad propia. La Torre d’Ara, nace para alojar oficinas, una gasolinera Meroil que acaba siendo el buque insignia del grupo en Catalunya y aloja, además, un nuevo concepto de concesionario: En 1996 se abre el primer concesionario multimarca para el Maresme y el Barcelonés Norte, agrupando hasta 10 marcas de primer orden como Volvo, Mazda, Kia, Grupo Fiat, Honda, Chrysler, etc... Nacía un nuevo concepto, nunca antes intentado, bajo el nombre de Auto d’Ara, y resultó un nuevo acierto de la familia Clavel, que los siguió posicionando como una empresa innovadora, capaz de anticiparse al futuro. Coincidiendo con esa época, se inicia una nueva división de la empresa dedicada a seguros de automóvil, como agentes de Allianz.
En 2006 se procedió a la venta de la Torre d’Ara y se inició el proceso de desinversión en automoción, culminado en 2008. La familia Clavel abandonaba así el negocio original vinculado a las concesiones de automoción para empezar una nueva etapa bajo la denominación Family Office. En este nuevo capítulo confluyen aun dos generaciones de la familia Clavel, Guzmán y Jordi, y se caracteriza por una diversificación de negocios, siempre buscando nuevas oportunidades. El grupo sigue integrado en Meroil, la petrolera que ha conseguido hitos como construir grandes depósitos de almacenamiento de combustible en el Puerto de Barcelona. Además, mantiene negocios de promoción inmobiliaria, tiene varias inversiones en starts-ups, es el primer mediador del Maresme de Allianz
para todo tipo de seguros y, desde 2016, vuelve a ser el grupo propietario de la Torre d’Ara.
Después de tres generaciones, D’Ara Grup sigue mostrando una actividad efervescente y muy diversa, tal y como demandan las actuales condiciones de mercado. La familia Clavel continúa expandiendo su Family Office sin renunciar a lo que
hace único un modelo de empresa basado en la familia, su capacidad de emprender y de seguir soñando. Continuamente.